La playa de la Higuera, situado en la ciudad de Budens es muy tranquila y tiene un cierto aire de orden mundial, posiblemente debido a la falta de vehículos en el paisaje. La playa está bordeada por acantilados de colores cálidos y con formas muy curiosas, que se puede ver, al este, las ruinas de una fortificación del siglo. XVI.
El aparcamiento es de unos 500 metros de la playa y el acceso peatonal es a través de un estrecho sendero que atraviesa uno de los valles más bellos de la región, con colinas verdes, áreas de bosque de pinos y enormes afloramientos de piedra caliza que se pueden ver cuevas enormes.
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